Un kilo de papelillos, media cucharada de serpentina, un chorro de vino, métalo en el horno escuchando una copla al tres por cuatro, y añádele un gorro de pirata y una nariz de payaso ¿Qué sale? Pues nada ¿Qué esperabas que saliera? Probablemente una guarrería. Y es que la creatividad y el carnaval no tienen fórmulas ni recetas. Sólo se necesita inspiración, y eso quizás sólo se consiga con una cerveza y entre amigos.

Momentos de inspiración y de creatividad son los que les sobra al barbateño José Huéscar, ganador del segundo premio del concurso creativo sobre el Carnaval de Cádiz para universitarios de la UCA, organizado por la Fundación Cruzcampo. Su obra, ‘Si no hay Cruzcampo ni canto’, está compuesta por tres gráficos, y cada uno representa distintas acciones dentro del carnaval gaditano: “hay una acción que es muy típica en Cádiz que es coger el servilletero y hacer el tres por cuatro con los dedos. Y la servilleta pasa lo mismo, siempre se ha utilizado para escribir las letras de cuplés”, explica el joven barbateño. “El servilletero te da el compás, la servilleta te la letra y Cruzcampo te da la inspiración”.

En la entrega del premio, el jurado ha destacado la combinación de elementos relacionados con Cruzcampo y la música carnavalera. “Se trata de una idea muy gaditana: marcar el compás con el servilletero, escribir las letras en la servilleta. El desarrollo gráfico es sencillo y divertido, y las tres piezas componen una campaña coherente y atractiva”.

Este joven estudiante de Publicidad y Relaciones Públicas explica que la idea surge viviendo el propio carnaval. Como relata, “lo vengo mamando de toda la vida”, y es que vive al lado del Bar Mantecoso, “el bar más carnavalero que hay en todo Barbate”. A ese elemento se le suma que su padre “tiene los amigos más carnavaleros de todo el pueblo”. Cada viernes, su padre y los amigos se unen para ‘relajarse’ de toda la semana. “En uno de esos viernes me salió la idea, y es más, en honor a ellos, a los amigos de mi padre, puse como titulo de la obra ‘Si no hay Cruzcampo ni canto’, una frase que ellos dijeron”.

José forma parte de una de las familias más queridas en la localidad, es nieto de Matías, el de los helados, aunque su sitio lo ve algo más alejado de sus famosos carros. “Dentro de la publicidad, me gusta más el campo de las cuentas y de la planificación estratégica, es decir, el intermediario entre el cliente y la agencia, que es la parte menos creativa de la publicidad”, explica. “Me gustaría dedicarme a eso y trabajar en Madrid en las principales agencias publicitarias”. 

El concurso de la Fundación proponía a los participantes la elaboración de una campaña gráfica de comunicación para el Carnaval, coherente con el posicionamiento de la marca Cruzcampo, tal como informa la empresa en su página web. Las 20 obras finalistas del concurso estarán expuestas hasta el 22 de febrero en la Casa de Iberoamérica de Cádiz.

No existen fórmulas para escribir cuplés, ni para tener buen compás con un servilletero en la mano. Tampoco hay recetas para ser creativo. Ni los papelillos ni las serpentinas contienen ingredientes para una imposible receta mágica, pero mezclado con una cerveza y entre amigos, como hemos visto, puede ser que se consiga.