04:24 h. miércoles, 24 de abril de 2024

“Nuestras esperanzas han llegado en forma de licencias”

Joaquín Fernández  |  15 de septiembre de 2014 (03:00 h.)
Licencia 1

Domingo Pacheco, uno de los armadores beneficiados por el acuerdo pesquero, volverá a faenar en los caladeros marroquíes esta misma semana

El barbateño Domingo Pacheco es el armador de la embarcación Chipiona I. A partir de esta semana podrá volver a faenar en Marruecos junto a sus seis tripulantes tres casi tres años sin calar las redes en el país vecino. “Hemos luchado por esto, y nuestras esperanzas han llegado hoy en formas de licencias”, comentaba Domingo el pasado viernes en la Casa del Mar, cuando el secretario general de Pesca, Andrés Hermida, le entregaba su licencia personalmente.

Pero la alegría se entremezcla con la incertidumbre. “Hasta que no lleguemos al caladero no sabemos como estará. Lo dejamos bien, favorable para la pesquería, pero han pasado cerca de tres años”, aclara Domingo ante los rumores de un mal año para la pesca en Marruecos. “Esperemos que la pesquería sea buena para que se creen puestos de trabajo”, añade. 

La alta inversión se conjuga con la rentabilidad que supone pescar en Marruecos. Domingo explica que su embarcación, de la categoría 2 en el reparto de licencias, se dedica a la pesca artesanal, no tiene “tope de pesca” y están exentos de contratar a marroquíes, al igual que de descargar en Marruecos.  “Vamos y venimos en el día, unas 12 horas, por lo que la inversión hay que analizarla detalladamente: la carnada, el palangre, el gasoil, la seguridad social, el esfuerzo de los trabajadores, así como otros gastos” son los que suma una jornada de trabajo para esta embarcación.  Para que sea favorable un barco de esta categoría que lleve de 5 a 8 tripulantes, “con una media de 1800 euros diarios en bruto es suficiente. Es una alta inversión pero la rentabilidad puede ser más alta”, explica.

Para algunos beneficiados, este acuerdo se ha quedado con "flecos" pendientes. “En nuestro caso, que es pesca artesanal, era el acuerdo que queríamos, porque no se ha tocado ningún punto del anterior convenio, que nos vino fenomenal y fuimos de los barcos agraciados en la pesquería” señala Domingo, con el deseo de que estos próximos cuatro años sean tan buenos como en los que se desarrolló el pasado acuerdo.

750 empleos directos e indirectos

Barbate ya ha recibido sus cinco primeras licencias para poder faenar en aguas marroquíes: tres de palangre y dos de cerco. Ahora tienen que realizar una inspección técnica en Tánger, aunque tres ya la realizaron el pasado sábado: Sirena, Raquel y Sheila y Chipiona I. Durante las próximas semanas, se sumarán las demás embarcaciones, una veintena, “para que en el cuarto trimestre podamos estar faenando todos en Marruecos”, explicó el pasado viernes el patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Barbate, Alfonso Reyes. 

No sólo el sector pesquero se va a favorecer de este nuevo protocolo, existen otras industrias que dependen directamente del sector: “exportadores, transportistas, trabajadores de la lonja, entre otros, y esto repercutirá en el pueblo, que tanta falta nos hace”, esgrimió Reyes. En total, los responsables cifran en una media de 400 los tripulantes que se beneficiarán directamente del acuerdo, y supondrá la creación de unos 350 empleos indirectos.  

El futuro de la flota barbateña mira a Marruecos. “Con este acuerdo tenemos otra puerta abierta para poder rentabilizar las empresas y el futuro de este pueblo. Por desgracia el futuro de Barbate tiene dependencia total de la pesca”, considera Tomás Pacheco, presidente de la Asociación Barbateña de Empresarios de Pesca (Abempe). Un acuerdo que ha llegado, según explica Pacheco, con ciertos detalles que finalmente no se han consumado: “el sector pretendía que todas las embarcaciones tuviéramos acceso al paralelo 33-25, que no hubiera limitación de buques. Tenemos esa ampliación de zona, pero sólo a cinco buques, y no sólo de Barbate”.

La alegría y la incertidumbre. La necesidad y el deseo. El futuro de la pesca pasa por Marruecos. “Hay años que son más prósperos y otros menos. Esperemos que estos cuatro años sean los mejores que tengan el caladero marroquí y se vea beneficiado este pueblo que tanta falta le hace”, anhela Tomás Pacheco.  

Últimos álbumes
Hemeroteca