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Barbate borra las últimas huellas del franquismo

J.Fernández/ L.Rossi  |  18 de febrero de 2014 (03:00 h.)

El Consistorio inicia los trámites para eliminar esta distinción a Francisco Franco, un nombramiento que sacó a la luz el pasado 18 de septiembre Heraldo de Barbate en un reportaje. 

Casi 45 años después, Franco sigue siendo Alcalde Honorario y Perpetuo de la localidad. Y es que en 1970, siendo alcalde Diego López Barrera, el pleno barbateño acordó otorgar este título al general. En 2014, el Ayuntamiento ha iniciado los trámites para la retirada de este nombramiento en virtud de la Ley de Memoria Histórica por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas a favor de quienes padecieron la repercusión o violencia durante la Guerra Civil y la Dictadura.

Tras su anuncio en el Boletín Oficial de la Provincia de Cádiz, el expediente se somete a información pública por el plazo de diez días en las dependencias municipales para que cualquier ciudadano pueda formular alegaciones. Aunque, el alcalde de la localidad, Rafael Quirós (PSOE), confía en que no se presenten alegaciones y, una vez cumplido el plazo, el expediente culmine con la retirada definitiva del título.

La plataforma local Foro Ciudadano de Barbate ha apoyado esta decisión “por cuestiones democráticas” ya que como explican en un comunicado “no se puede tolerar que alguien como Francisco Franco ocupe un puesto de honor en nuestro municipio”. Por ello, la plataforma exige también que el Consistorio tenga en cuenta otros vestigios de la época franquista que todavía pululan en el municipio, aunque consideran que son “piezas del patrimonio”, y que no deben ser destruidas sino conservadas, “para que a lo largo de la historia se conozca lo que no son prácticas democráticas y que no se vuelvan a repetir”.

Un apellido imborrable

El 21 de octubre de 1949 se le concedió al general el título de Fundador, por lo que el municipio se pasó a llamar Barbate de Franco, siendo en mayo de 1950 cuando el Ministerio del Interior lo ratificó. No será hasta 1998 cuando el BOJA publicaba el decreto por el que se aprobaba el cambio de denominación para quitar el 'apellido' que a mediados de siglo un pleno extraordinario de la localidad le otorgó.

Pero este apellido continúa siendo imborrable. Por ello, el regidor barbateño ha hecho un llamamiento a determinadas administraciones públicas, "como la Agencia Tributaria", para que "dejen de dirigir escritos al Ayuntamiento refiriéndose a la ciudad por su nombre antiguo", que era Barbate de Franco.

Una huella, al igual que el apellido, permanente. Durante el pasado siglo fueron varias las menciones y los títulos concedidos a Franco en la localidad. Entre ellos se le otorgó el premio de ‘Medalla de Oro, Platino y Brillantes’, un nombramiento que sigue vigente en la actualidad, tal como informó Heraldo de Barbate el pasado septiembre.

Algunos edificios públicos y varias calles todavía guardan el recuerdo de la época. En el propio edificio del Ayuntamiento es posible encontrar dos escudos del Barbate franquista. Uno en la propia fachada del edificio y otro en el interior, en una placa homenaje al primer alcalde tras la independencia de la localidad en 1938, un vestigio que también aparece en relieve en la mesa que preside el Salón de Plenos. Estos recuerdos de la época se mantienen todavía expuestos debido al alto coste que supone quitarlos, según fuentes del Consistorio. En cuanto a las calles, la Ley de Memoria Histórica obligó cambiar la denominación de 37 calles en 2008 en todo el municipio, aunque algunas han quedado debido a su importancia en la independencia de la localidad.

Estas huellas contradicen el artículo 15 de la Ley de Memoria Histórica, que insta a las Administraciones Públicas a tomar las medidas oportunas para la retirada, en el ámbito de sus competencias, de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura. Una mención que no ha sido suficiente para que la localidad gaditana borre la huella franquista por completo.

Un alcalde no tan perpetuo

Aunque miles de ciudadanos ignoran si sus ciudades guardan todavía en su historia algún título al General, muchos Ayuntamientos andaluces han despojado al dictador de sus menciones.

En 2007,  Franco dejó de ser Hijo Predilecto y Adoptivo de Málaga; en 2008, dejó de poseer la medalla de oro de Cádiz y en ese mismo año, el Ayuntamiento de Valverde del Camino (Huelva)  también derogó un acuerdo de 1966 que nombraba a Franco Alcalde Honorífico de la localidad a perpetuidad. En 2009, Almonte derogó también el título de Alcalde Honorario, y en Algeciras no fue hasta 2011 cuando su Junta de Gobierno acordó revocar los nombramientos de Francisco Franco como Hijo Adoptivo y como Alcalde Perpetuo de la ciudad.

Han sido muchas las ciudades que han aprobado sus medidas de acuerdo con la Ley 52/2007, de 26 de diciembre, conocida como Ley de Memoria Histórica, aprobada en el Congreso de los Diputados y en el Senado. Todavía quedan vestigios en Andalucía, aunque probablemente sean revisados cuando se apruebe la nueva ley de Memoria Democrática en la comunidad. Hasta entonces, seguirá habiendo huellas. 

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