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La manera de cuidar las semillas de la juventud

Joaquín Fernández  |  09 de octubre de 2013 (03:00 h.)
Jesús Troitiño (izq.) y David Rodríguez (der.) son los responsables de Juventud.

Más de una docena de talleres se impartirán este otoño a través de las asociaciones juveniles 

Hay plantas que crecen de semillas. Semillas que poco a poco van prosperando. Esa vegetación, si se ha ido regando, irá creciendo y, posiblemente, esas plantas terminen brillantes y bonitas. A veces, las semillas no son buenas y no brotan como deberían. No es que haya semillas buenas o malas, o a lo mejor sí, pero si no las riegan lo suficiente, ni se les cuida, probablemente esas plantas no florezcan como deberían y terminen secándose y, finalmente, muriendo.

Los jóvenes son esas semillas de un pueblo. A las que hay que cuidar, que regar, a las que hay que hablarles y, sobre todo, escucharlas. En ocasiones, cuando les salgan hojas malas, habrá que podarlas, puesto que siempre hay que estar pendientes de ellas. Pero si se les cuida, si se les hace caso, si les dejan hablar, formarán parte de una planta verde, brillante y fuerte. Para ello, necesitarán  alguien que las riegue y, también, buenas regaderas.  

David Rodríguez, delegado de Juventud, y Jesús Troitiño, coordinador de la Casa de la Juventud, se han convertido en los jardineros que tratan de atender a esas semillas, a los más jóvenes de la localidad. El edificio que coordina Jesús Troitiño, el Consejo de Juventud creado para escuchar la voz de los más jóvenes, y las más de una decena de asociaciones juveniles, son las regaderas que ayudan a crecer a estas semillas.

Un otoño con nuevas actividades

Tanto David como Jesús destacan la disponibilidad y las inquietudes que tienen los jóvenes de la localidad. Comentan que gracias a las nuevas infraestructuras y colectivos creados pueden ver cumplidas sus demandas. Y es que “son los propios jóvenes los que se crean su entretenimiento. Siempre hemos pretendido que participen”, destaca el delegado de Juventud.

Para este otoño serán más de una docena los talleres de diversas temáticas que se impartirán en la Casa de la Juventud, todos ellos organizados por las propias asociaciones juveniles. “Los chavales ahora ven que pueden participar, y que la política de Juventud la hacen ellos mismos. Los concejales venimos y nos vamos, pero los jóvenes se quedan, por eso la hacen ellos”, comenta David. Señala, además, que en cuestión de Juventud, Barbate se encuentra a la cabeza de la provincia. Jesús Troitiño explica que destaca sobre todo el movimiento asociativo y las infraestructuras que existen, como ya le han comentado otros compañeros de la provincia.

Desde Juventud utilizan una serie de herramientas para conocer los gustos e inquietudes de los jóvenes de la localidad. Encuestas por colegios e institutos y la exposición de las opiniones de los propios jóvenes a través de asociaciones y otros colectivos. Lo que más demandan actualmente son cursos de formación para el empleo, según comenta Jesús Troitiño. Además tienen otras preocupaciones y le hacen llegar otros problemas para encontrar soluciones: el ocio, pero además, la imposibilidad que tienen algunos para continuar sus estudios sin becas.

La Casa de la Juventud sólo tiene dos años. El Consejo Municipal, ni uno. “Es un inicio. Estamos aprendiendo, pero en este tiempo hemos visto como ha evolucionado el tema de juventud”, se sincera David. En dos años, estos “jardineros” han conseguido regar lo suficiente para ofrecer una oferta de ocio al joven barbateño, para que pueda desarrollar sus inquietudes y sentirse escuchado pero, sobre todo, para conseguir que la planta en un futuro pueda estar fuerte y sana.

 

 

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