Algo se transforma en mí llenándose de sonrisas mi boca, tengo un brillo especial en los ojos, hablo bajito a modo de susurro y me digo: Voy a ser madre, es mi niña….Deseo vivir este embarazo, me emociona  y anhelo  que llegue el momento.

Noto el aumento de tamaño de mis pechos, segregando prolactina para cuando llegue el momento de amamantarla .Mi cuerpo se va preparando en función de ese ser que llevo dentro de mi. La amo incondicionalmente, siento sensaciones que me sumergen en una especie de intimidad emocional que hace que la ame, la amo tanto, que no sabría explicarlo con palabras más grandiosas, que  le hagan honor, porque es algo que hay que sentir y  vivir. Cada trozo de mi, se siente identificado, se siente  complementado, útil, sensible, apto, como semilla que da fruto .Mi pensamiento alineado en ella, mis sentimientos a flor de piel. Llevo dentro de mí la experiencia grande y hermosa de una mujer que desea con  intensidad procrear, porque herencia de Dios son los hijos.

Y yo no renunciaré a ese legado… Pequeñita mía: Gracias  por hacerme sentir esta felicidad, traerte al mundo aun a través del dolor que sentiré,  me será compensando cuando oiga tu primer llanto, cuando mis brazos te toquen por primera vez y mi piel se abrace en la tuya, y se establezca ese lenguaje intimo que roza lo eterno de tus ojos a mis ojos, de tu boca hasta mis pechos. Aun vives dentro de mí. Tu estas en un estado de equilibrio perfecto, tienes cuanto necesitas, en el momento de nacer, será cortado el cordón umbilical que biológicamente te une a mi, saldrás al exterior porque ya se ha realizado el proceso de la gestación.

Tú serás ya vida independiente fuera de mi útero, tendrás tu propio ADN, más siempre estaremos ligadas en los afectos, nadie podrá ser tu madre excepto yo  y tu serás mi hija para siempre. Primero serás lactante, necesitaras cuidados especiales como todos los bebés, crecerás cada día, serás la alegría de todos y se establecerán vínculos de amor, la familia aumentará con tu llegada. Cada día sucederá al siguiente y cada año a otro. Llegará  cada momento, paso a paso. Oiremos tus risas y tus llantos, seremos participes de cuanto irás aprendiendo. Por primera vez  llegarás al colegio  y te costará separarte de nosotros, pero allí conocerás a tu primera maestra, la compartirás con otros niños  y te dará cariño. Tendrás amigos, jugarás  y se formará tu carácter y personalidad a través de los años, Mamá y papá serán las personas más importantes, tus hermanitos los abuelos y demás familia.

Y un día cuando te hagas mayor entenderás que la vida es hermosa, te enamoraras… Querida hijita: A esa edad habrás vivido muchas experiencias habrán sido tantos besos y tantos abrazos, tanta complicidad entre nosotras, que entenderás cuan hermoso es el legado que como mujer se puede transmitir, el regalo de la vida es tan grande que tú darás gracias por vivir y yo daré gracias por haberte dado a luz…

Mi amor: el día que tu seas madre vivirás lo mismo que yo, pensarás que la existencia es extraordinaria, e importante, algo especial, un propósito, un sueño de mujer y el anhelo de un hombre que se unen en una convicción, en una decisión que se hace realidad, un volver a empezar el ciclo vital en la historia del Universo. Pero todo está por llegar, las paginas, todavía no están escritas, todo ocurre en el presente y en el futuro, el día vivido se convierte en pasado.

Deseo para ti mi amor, qué vivas tu propia vida, es única, como tú, se puede parecer o asemejar a algunas otras. Más tú serás quien tengas que ser .Gozaras de libre albedrío. Recuerda que siempre habrá alguien que te ayudará en el camino, aquel que nos amo primero.

Quiero dejar constancia, que la vida es un milagro. El mejor de los regalos, Porque fuimos formados desde las entrañas de una madre y los ojos de Dios pueden ver a un pequeño embrión, y mirarlo con sus ojos de amor.

Tres meses después de lo escrito, llegaste a este mundo.

Ya estas aquí mi amor…

 Tú brillas…

Te llamas Luz.

Tu nombre está escrito en el libro de la vida

Y eres” Vida de mi vida”