Mi perra Plutarca se acerca, me mira con sus ojos transparentes, como limpio cristal, sus orejas  pellejas,  su cuerpecito peludo y gris. Yo le cuento cosas, pareciera que entendiera…. Le hablo de la vida, del mundo, de mis sentimientos, y ella inocente come de mi mano y no le importaría que alguien le diera tan solo las migajas, las comería igual, no es un ser humano dotado de inteligencia, ella sabe ladrar y le encanta comer, come sin parar, quizás sea una perrilla ansiosa, porque los animales pueden sufrir estrés, al igual que las plantas pueden tener  estrés hídrico. A ella le encanta la música. Sentada en la alfombra puede oír a Beethoven  a Mozart, o cualquier música instrumental. Se queda extasiada y sin rechistar. Yo diría que hasta la relaja.

Últimamente le conté un cuento y estaba atenta, discreta, siendo tan animal…Así que decidí de vez en cuando leerle alguna cosa de las que escribo.  Porque se que ella es una perrita agradecida y lo que necesita es que le presten atención, que le hablen, que jueguen con ella ¡Es para  verla! Tan llena de misterio, con sus ojos fijos, expectantes, solo se mueve para rascarse o lamerse su pierna herida, fruto del desamor de una perra agresiva y otro perro traidor que también le asestó un bocado para quitarle un trozo de carne. Y pasó tantos días lastimada, que cuando la miro siento compasión, ya que sufrió mucho. Ella es  especial… cariñosa y llena de encanto a mis ojos…

Le gusta oír mi poesía ,la calma, la tranquiliza oye mi voz y la sueña y no se duerme hasta que le hago la ultima caricia, en la que se pone panza arriba, y es curioso cuando comienzo a leer no se levanta hasta que no ve que ha terminado el poema .Me gusta por lo noble que es ,aunque no pertenezca a la nobleza, ella era sencillamente una perrita callejera, no es de pura raza, ni tiene pedigrí,  más ha  sido afortunada ,dejó de ser callejera desde el momento que la adopté y le ofrecí un hogar y un espacio en todos los sentidos, pudiera ser que a los ojos de muchos no fuera valiosa o importante, en lo que a mi respecta la volvería a reelegir si pudiera .”Ella es única por ser afectuosamente nuestra, mascota de todos los miembros de la casa, es una mas entre nosotros. La elegí no por su gran belleza, sino que me conmovió el verla desamparada e indefensa, dormía en la calle como muchas otras,  pero cuando la vi tan íntimamente triste, sólo quise que su  vida cambiara a un estado mejor de lo que había vivido hasta ahora.

Plutarca cariño, se   que te falta  el cromosoma humano, por eso eres una perra…Inocente y sin maldad, tan sumisa y obediente que callas y no hablas, porque no puedes hablar. Obedeces la voz de quien te ordena y manda, tu que  nunca te quejas, pero te diré algo. Realmente  en la actualidad, hay motivos por  y para protestar, el tiempo en que vivimos resulta bastante duro  y  hay que tener fuerzas y ganas de luchar por los derechos, pero al mismo tiempo cada vez hay menos derechos, resulta incongruente pero así es, tu eres mas afortunada que muchos seres humanos.

Comes cada día ,pero hay gente que ya no tienen ni su ración de comida, de ilusión o de esperanza, hay gente que defiende su condición, pero al final, no viven, no comen ,no duermen, se están muriendo de indefensión ,se mueren de desamor y de muchas mas cosas,  hay tanto por hacer …Tanto que aprender y tanto que luchar….

Hoy  te he contado lo que quería contar y es mi deseo  regalar un poema, porque es mi manantial de palabras,  me da fuerzas algunas veces a lo largo del camino, Y el medio para expresar pensamientos sentimientos e ideas.

EL OJO POÉTICO

Abre bien los ojos…

No dejes que te mientan...

Oye la voz del pensamiento,

Guarda en tu corazón

una palabra siempre nueva…

No te canses, ni te marchites

Como afanada rosa.

Ama y bendice el fruto de cada día.

Tu siembra, tu siembra…

No te  rindas, no te aflijas…

El te protege  y guarda.

Su amor nunca cambia.

Tú eres dama de su reino.

Su ojo poético te regala

la luz de su inspiración.

Y  el verso que fluye de tu boca….

Lo roza, lo abraza, lo besa.

Y con un amor inmenso lo toca….

Juana Maria Malia